Complicada película, pero muy ilustrativa, más en los tiempos que corren. Como dice Abadía, ésta es una crisis de decencia.
"Una investigación llevada a cabo por el agente de la
Interpol Louis Salinger y la ayudante del fiscal del distrito en Manhattan
Eleanor Whitman está a punto destapar un escándalo mayúsculo de venta de armas
en países del tercer mundo a través de un banco tapadera con sede en
Luxemburgo. Pero la persona que servía de contacto con el banco es asesinada
con una limpieza escalofriante, y a partir de ese momento se ponen en marcha
resortes muy poderosos para no dejar resquicios que permitan denunciar el caso.
Lo que supone el empleo de asesinos profesionales, que ponen en su punto de
mira a personas muy importantes, como Calvini, uno de los políticos favoritos
para ocupar el puesto de primer ministro en Italia.
En un contexto como el actual, de crisis económica y recelo hacia el sistema financiero mundial, desde luego este film no es de lo que devuelven la confianza hacia los bancos. La trama se inspira en un caso real: la caída del Banco Internacional de Crédito y Comercio, fundado por Agha Hasan Abedi en Karachi, Pakistán, en los años 70. El banco se implicó en la mayor operación de dinero de la historia y se involucró en negocios de tráfico de armas, ejércitos de mercenarios, e inteligencia y apoyo al terrorismo. En Reino Unido y Estados Unidos se destaparon sus turbios manejos en 1991, cuando el banco se declaró en bancarrota. Según el guionista Erin Singer, el escándalo del BCCI fue "el mayor delito cometido por una empresa en toda la historia". DeCine21.
En un contexto como el actual, de crisis económica y recelo hacia el sistema financiero mundial, desde luego este film no es de lo que devuelven la confianza hacia los bancos. La trama se inspira en un caso real: la caída del Banco Internacional de Crédito y Comercio, fundado por Agha Hasan Abedi en Karachi, Pakistán, en los años 70. El banco se implicó en la mayor operación de dinero de la historia y se involucró en negocios de tráfico de armas, ejércitos de mercenarios, e inteligencia y apoyo al terrorismo. En Reino Unido y Estados Unidos se destaparon sus turbios manejos en 1991, cuando el banco se declaró en bancarrota. Según el guionista Erin Singer, el escándalo del BCCI fue "el mayor delito cometido por una empresa en toda la historia". DeCine21.