08/02/2021

El juego

 

Domenico Starnone
Lumen 2020

Un matrimonio napolitano que no se lleva bien se va a un congreso. Para que cuide de su hijo de cuatro años, esos tres días, llaman al abuelo, un pintor en bastante baja forma que acaba de pasar por una intervención y vive en Milán. Mario, el nieto, es muy espabilado y su único afán es jugar. Y el abuelo, a parte de que quiere trabajar, no sabe seguirle demasiado bien la cuerda. Lo mejor del libro, la relación abuelo-nieto, con los altibajos anímicos del primero y la lógica aplastante de un niño de cuatro años. Muy desasosegante, a veces cruel. Cuando termina la acción, sigue unas páginas más donde el abuelo describe las ilustraciones que está realizando y sus pensamientos. Interesante. Pero lo he leído en digital, y las ilustraciones y maquetación pierde. Un 8.

Visualiza un duelo. Dos figuras se enfrentan, sangre de la misma sangre. Uno tiene más de setenta años y es un afamado ilustrador que lleva tiempo viviendo completamente solo. El otro, más bajito, es su nieto: un niño revoltoso de cuatro años con un vocabulario vasto y precoz. Apenas se han visto un par de veces, pero ahora el abuelo va a tenerlo a su cuidado tres días enteros. Los padres han ido a un congreso, o quizá en realidad necesitaban tiempo para averiguar si su matrimonio ha llegado a un callejón sin salida. Cuatro paredes y un balcón serán los límites entre esta historia, la de un abuelo cansado y distraído y un pequeño sargento que lo pone a prueba, y otra historia, en sordina: la de un matrimonio en crisis y un gran amor que amenaza con resquebrajarse.